Los vidrios de seguridad cumplen dos funciones muy claras, el evitar lesiones que puedan sufrir las personas a consecuencia de la rotura accidental y por otro lado las lesiones o daños producidos por actos vandálicos, robos, disparos, etc. Se pueden emplear en comercios, viviendas particulares, hospitales, bancos, etc. Se proporciona el certificado correspondiente de homologación para cada tipo de vidrio cumpliendo así las normativas establecidas.